CD009 Muera Cupido

Disco premiado con el Opus Klassik 2020 de la industria discográfica alemana al Mejor Recital de Ópera (categoría absoluta) para Núria Rial, Alqhai y la soprano catalana exploran el repertorio operístico de la España en torno a 1700.

Muera Cupido

Las etiquetas que utilizamos para clasificar los estilos artísticos suelen esconder tras ellas mundos tan ricos y diversos que a veces significan muy poco. Un buen ejemplo de ello es el uso de la palabra “barroca” para la música compuesta en los siglos XVII y XVIII, y el caso español es particularmente revelador.

Fue, paradójicamente, la subida al trono de la familia francesa de los borbones lo que trajo a Madrid, en 1701, el maremoto que anegaba la Europa musical del momento: el estilo italiano. Hasta entonces la música española se regía por tradiciones y reglas propias, con armonías características, una escritura instrumental a veces poco idiomática, una escritura vocal muy silábica, e incluso con una notación especial para sus singulares ritmos entre el binario y el ternario —unos ritmos muy flamencos, diríamos hoy—. Esas características son aún reconocibles en Sosieguen, descansen de Durón y en las danzas coetáneas que nos servirán como interludios instrumentales.

Las cantatas italianas de la Biblioteca Nacional de España (All’assalto de pensieri y Pastorella che tra le selve) nos servirán sin embargo como ejemplos de la introducción de lo que ya entonces llamó North “el fuego y la furia del estilo italiano”. La llegada de los borbones significó también el ascenso de Durón a maestro de capilla (pese a que, curiosamente, Durón acabó sus días en el exilio descubierto como entusiasta austracista), y títulos como arietta ytaliana revelan sus intentos inequívocos por adaptarse a los nuevos tiempos, que le costarían décadas después ser acusado de italianizante por el el padre Feijoo en Música de los templos (Teatro crítico universal, 1726):

Esta es la música de estos tiempos, con que nos han regalado los italianos, por mano de su aficionado el maestro Durón, que fue el que introdujo en la música de España las modas extranjeras. Es verdad que después acá se han apurado tanto estas, que si Durón resucitara, ya no las conociera; pero siempre se le podrá echar a él la culpa de todas estas novedades, por haber sido el primero que les abrió la puerta.

Es probable que Feijoo se llevase las manos a la cabeza al escuchar en los años inmediatos a ese texto las óperas y zarzuelas de José de Nebra, que asumió ya plena y magistralmente el fogoso estilo italiano, con sus recitativos secos llenos de modulaciones atrevidas, sus arias da capo, una escritura instrumental específica, coloraturas exigentes en la escritura vocal… Al combinarlos hábilmente con formas y ritmos entonces populares como el fandango o la seguidilla Nebra condujo una exitosa carrera en el efervescente mundo de la música escénica madrileña de la primera mitad del XVIII, sin renunciar para ello a las cualidades que lo convierten, en opinión de muchos, en el mejor compositor español de su siglo.

Juan Ramón Lara

MUERA CUPIDO
Música teatral en España de ca. 1700
Núria Rial, soprano
Fahmi Alqhai, quintón y dirección

ACCADEMIA DEL PIACERE
Rodney Prada, quintón
Johanna Rose, viola da gamba (solo en track 9)
Rami Alqhai, violón
Miguel Rincón, archilaúd y guitarra barroca
Francisco Javier Núñez, clave


Grabado en Sevilla en 2018
Adaptaciones: Fahmi Alqhai
Jordi Gil (Sputnik), grabación
Álvaro Torrente, asesoría musicológica.
Juan Ramón Lara, asesoría musical

1. Pavana 4:35
Francisco Guerau (1649-approx.1722), arranged by Fahmi Alqhai

2. Y, pues consentir no debo (recitado) 3:05
3. Yo hermosísima Ninfa (aria) 3:29
De “El imposible mayor en amor le vence Amor” atr. a Sebastián Durón (1660-1716) y a José de Torres (ca. 1670-1738)

4. Quantos teméis al rigor 5:38
Arietta ytaliana – Rezitado [Brioso] – [Vibo] from “Las nuevas armas de Amor”, de Sebastián Durón

5. Marionas 5:18
Fahmi Alqhai

6. Pastorella che tra le selve 3:39
Giovanni Bononcini (1670-1747) (Ms. 2245 of Biblioteca Nacional de España)

7. All’assalto de pensieri 4:55
‘Cantada’ anónima (Ms. 2246 of Biblioteca Nacional de España)

8. Xácara 4:26
Francisco Guerau – Fahmi Alqhai

9. Sosieguen, descansen 6:16
Solo humano, de “Salir el Amor del Mundo”, de Sebastián Durón

10. Selva Florida 7:31
Aria de “Viento es la dicha de Amor”, de José de Nebra (1702-1768)

11. Fandango 2:16
José de Nebra & Javier Núñez

12. Tempestad grande, amigo 3:18
Fandango de “Vendado es amor, no es ciego”, de José de Nebra

13. Adiós, prenda de mi amor 9:38
Aria de “Amor aumenta el valor”, de José de Nebra

    TEXTOS

    Y, pues consentir no debo
    Recitado
    Yo hermosísima Ninfa
    Aria
    de “El imposible mayor en amor le vence Amor”
    Atribuida a Sebastián Durón y a José de Torres (ca. 1670-1738)

    [AMOR]
    Y, pues consentir no debo
    ultrajes a mi deidad,
    cuando tan libre blasonas
    que mis flechas burlarás,
    esta, cuya punta de oro
    tocada al benigno imán
    de mi hechizo,
    es solo indicio
    del poder de las demás,
    puesta en la tirante cuerda,
    mi impulso haciendo juntar
    las puntas del arco,
    el viento tan veloz penetrará
    que áspid alado se deje
    sentir sin verse volar.
    Y, cuando gimas al duro
    tirano golpe fatal,
    no de mis iras te quejes
    pues lo que pides, te dan.

    [JUPITER]
    ¡Oye… escucha… aguarda… espera!
    fementido desleal, traidor
    mas, ¡ay de mí!,
    ¿Qué áspid cruel y tenaz
    es este que muerde el pecho,
    cuyo tósigo se va
    poco a poco apoderando
    del sentido racional?
    Sin uso la voz, el pecho sin aliento,
    a tanto afán ni puedo el dolor huir,
    ni acierto un eco a formar.

    [ARIA]
    Yo, hermosísima ninfa
    de cuya luz aprehenden
    otra vida las selvas
    que las rejuvenece,
    soy el Dios que, rigiendo
    ese eterno zafir transparente,
    desde el punto que vio tu belleza,
    ni en sí mandar puede.

    Jove soy, cuyos rayos
    se queman en la nieve
    de tu semblante hermoso,
    en quien, perfectamente,
    maridajes de púrpura y nácar
    vertiendo claveles,
    el incendio que arrojan
    tus ojos o templan o vencen.

    Y pues a tus plantas
    por víctima ofrece
    el Dios de los dioses
    su vida y su muerte,
    sepa de ti si tus ojos merece,
    no más apacibles,
    sí menos crueles.

    Quantos teméis al rigor
    Arietta ytaliana – Rezitado [Brioso] – [Vibo]
    de “Las nuevas armas de Amor”
    Sebastián Durón

    Quantos teméis al rigor
    llorad conmigo, llorad,
    que en muriendo el amor
    ha de reinar la impiedad.

    Mas, ¿qu’es esto, iras mías?
    Yo desmayo,
    ¿no soy yo el rayo
    a cuyo ardor violento es inútil
    pavesa el firmamento? Pues
    denande vengarme
    invocaré a Diana
    con cuya altiva fuerza soberana
    haré que el Dios tonante llore su mal
    cuando mi ruina cante.

    Claras fuentes, puros cielos,
    plantas bellas, tiernas aves,
    que con hojas, con matices,
    con reflejos, con cristales,
    unidos murmurad de mis ultrajes:
    atended y veréis
    que a mis voces fabrico
    heroicas venganzas, débiles desaires.

    ¡Ha del palacio sumo,
    ha del bello homenaje,
    reverenciado templo
    de célebres deidades!
    Oídme, qu’amor viene
    a que en Diana le armen
    dulces obstinaciones
    de esquivas libertades
    se d’una vez piadosas;
    mas ya a mi voz se abren
    del desdeñoso alcazar
    las puertas de diamante;
    y aun dividiendo el día
    en astros materiales
    Diana con sus ninfas
    diciendo acordes salen.

    Claras fuentes (…)


    Pastorella che tra le selve
    [ms 2245 de la Biblioteca Nacional de España]
    Giovanni Bononcini (1670-1747)

    Pastorella che tra le selve
    i suoi giorni passando va;
    e trà boschi e trà le selve
    vò cantando
    quanto è bella la fedeltà.

    Cantada “All’assalto de pensieri”
    [ms. 2246 de la Biblioteca Nacional de España]
    Anónimo

    All’ assalto de pensieri
    l’alma mia non cederà.

    In un mar d’afanni e pene
    ben che temi, ben che speri,
    saldo il cor trionferà.


    Sosieguen, descansen
    Solo humano, de “Salir el Amor del mundo”
    Sebastián Durón

    Sosieguen, descansen,
    las tímidas penas, los tristes afanes,
    y sirvan los males de alivio en los males.
    Sosieguen, descansen.

    ¿No soy yo aquel ciego voraz, encendido volcán intratable,
    en quien aun las mismas heladas pavesas o queman o arden?
    Pues, ¿cómo es fácil
    que haya nieve que apague el incendio de tantos volcanes?

    ¿No soy quien al sacro dosel de los dioses deshizo arrogante,
    su púrpura ajando los fueros sagrados de tantas deidades?
    Pues, ¿cómo es fácil
    que en mi oprobio, tirana, sus leyes mi culto profanen?

    En fin, ¿no soy yo de las iras de Venus sagrado coraje,
    en cuyos alientos respira castigo su hoz o su imagen?
    Pues, ¿cómo es fácil
    que deidad que fabrica mi imperio permita mi ultraje?

    Pero ya que a la fatiga tan rendido el pecho yace,
    que un desaliento palpita en cada temor que late,
    y ya que en el verde centro de enmarañado boscaje,
    que compone la frondosa tenacidad de los sauces,
    seguro estoy de que puedan las cóleras alcanzarme
    de Diana: firmen treguas mis repetidos afanes.

    Y en este risco a quien hoy, para que sobre él descanse,
    hizo el acaso que siendo escollo sirva de catre,
    entreguemos a esta dulce lisonja de los mortales
    la vida, pues a este efecto dijeron mis voces antes:

    Sosieguen, descansen (…)


    Selva Florida
    Aria, de “Viento es la dicha de Amor”
    José de Nebra (1702-1768)

    Selva florida,
    tronco frondoso,
    cristal undoso,
    cándida flor,
    decidle a mi bien
    que muero de amor.

    Decidle que mude
    su fiero desdén,
    que amando yo bien,
    merezco el favor.

    Selva florida (…)

    Tempestad grande, amigo
    Fandango, de “Vendado es amor, no es ciego”
    José de Nebra

    Tempestad grande, amigo, se armó en la selva.
    ¡Muchas tempestades arman las suegras!
    ¡Ay, qué Brújula, Brújula, Brújula!
    ¡Ay, qué páparo, páparo, páparo!
    ¡Que es tu Títiro, Títiro, Títiro!
    ¡Es mi zángano, zángano, zángano!
    Y en bailando este son fandanguítico,
    se les da de estos ruidos un rábano.


    Adiós, prenda de mi amor
    Aria, de “Amor aumenta el valor”
    José de Nebra

    Adiós, prenda de mi amor
    que tú lograrás vencer,
    pues mi alma has de tener
    y ella te dará valor.

    Tu esposo pretendí ser,
    no lo quiso hado traidor;
    con morir, con fallecer,
    satisfaré su rigor.

    Adiós, prenda de mi amor (…)

    ENGLISH TRANSLATIONS

    Y, pues consentir no debo
    Recitado
    Yo hermosísima Ninfa
    Aria
    from “El imposible mayor en amor le vence Amor”
    Attributed to Sebastián Durón (1660-1716) and José de Torres (ca. 1670-1738)

    [CUPID]
    I must not consent
    outrages to my deity,
    as you do, so free, when you boast
    of evading my arrows;
    this one, whose golden tip
    touched the benign magnet
    of my spell,
    it’s just a sign
    of the power of the others.

    I’ll put it on the taut string;
    my strength will bring together
    the tip and the bow,
    and the wind so fast will penetrate
    that you will hear this winged asp
    without seeing it fly.
    And, when you moan
    after its deadly blow,
    do not complain about my anger:
    what you ask, they give you.

    [JUPITER]
    Hear me…listen to me…wait…await!
    disloyal liar, traitor,
    but… alas!
    What is this cruel and tenacious asp
    that bites my chest,
    whose venom is slowly
    taking over my reason?
    Without voice, my chest without air,
    despite my effort I cannot escape the pain,
    nor can I form an echo.

    [ARIA]
    Beautiful nymph
    from whose light
    the jungles acquire a new life
    that rejuvenates them:
    I am the God who, ruling
    that eternal, transparent sapphire,
    since the moment I saw your beauty
    I cannot even rule myself.

    I am Jupiter, whose rays
    are burned in the snow
    of your beautiful countenance,
    on which, perfectly,
    purple and nacre pairings
    —pouring carnations—
    temper or conquer the fire
    thrown by your eyes.

    And since the God of the gods,
    as a victim, offers
    His life and His death
    at your feet,
    He wants to know if He deserves
    that your eyes are,
    maybe not more peaceful,
    but at least less cruel.

    Quantos teméis al rigor
    Arietta ytaliana – Rezitado [Brioso] – [Vibo]
    from “Las nuevas armas de Amor”
    Sebastián Durón

    You, who fear the vigour,
    cry with me, cry:
    if love dies
    impiety will reign.

    But… what is this, oh, my anger?
    I faint!
    Is it not I the burning, violent ray
    in front of which the firmament
    is only a useless ash?
    To get revenge
    I will invoke Diana
    with whose haughty, sovereign strength
    I’ll make the thundering God cry his misfortune
    when he sings my wreck.

    Clear fountains, pure heavens,
    beautiful plants, tender birds,
    that with leaves, with nuances,
    with reflections, with crystals,
    all together you murmur my outrage:
    listen and you will see
    how I can make heroic revenge
    and weak rebuffs.

    Supreme palace!
    Beautiful tribute!
    Revered temple
    of famous deities!
    Listen to me: love is coming
    where Diana is, to be armed
    with sweet obstinacy,
    with elusive freedom
    sometimes merciful.
    But now, at my command,
    they open the diamond doors
    of the disdainful castle;
    and dividing the day
    by celestial bodies,
    Diana and her nymphs come out
    singing chords.

    Clear fountains…

    Pastorella che tra le selve
    [ms 2245 of the National Library of Spain]
    Giovanni Bononcini (1670-1747)

    A shepherdess spends
    her days in the forests:
    in the woods and in the forests
    I’m singing
    how beautiful is fidelity!

    Cantada “All’assalto de pensieri”
    [ms. 2246 of the National Library of Spain]
    Anonymous

    My soul will not surrender
    to the attack of my thoughts.

    In a sea of grief and pain,
    no matter feeling fear or hope,
    the resolute heart will triumph.

    Sosieguen, descansen
    Solo humano, from “Salir el Amor del mundo”
    Sebastián Durón

    Calm, rest,
    timid sorrows, sad worries,
    and let ills serve as relief amongst ills.
    Calm, rest.

    Is it not I that blind man, fiery, voracious, intractable volcano
    in whom the same frozen embers still burn or flame?
    For, is it maybe easy
    that there be snow to put out the fire of so many volcanoes?

    Is it not I the one who arrogantly destroyed the sacred altar of the gods,
    the one whose purple ruined the sacred laws of so many deities?
    For, is it maybe easy
    that, shame on me, the laws of the tyrant can profane my cult?

    In the end, is it not I the sacred courage opposing of the wrath of Venus,
    her voice or her image breathing punishment in front of my breathing?
    For, is it maybe easy
    that the deity who builds my empire allows my outrage?

    But since fatigue makes my breast so exhausted,
    since discouragement palpitates in the beating of each fear,
    since, I am sure, I may incur Diana’s wrath
    even amidst the green center of the entangled wood
    which contains the leafy strong willows,
    I want that my repeated worries beg for a truce.

    And on this cliff upon which I will rest today,
    that will serve as my bed despite being an obstacle,
    let us deliver our lives to this sweet flattery of mortals,
    since this is the intended effect of my previously uttered words.

    Calm, rest (…)

    Selva Florida
    Aria, from “Viento es la dicha de Amor”
    José de Nebra (1702-1768)

    Flowery forest,
    leafy trunk,
    wavy glass,
    innocent flower:
    tell my sweetheart
    I’m dying of love

    Tell her to change
    her fierce disdain;
    that I love well,
    so I deserve her favor.

    Flowery forest (…)

    Tempestad grande, amigo
    Fandango, from “Vendado es amor, no es ciego”
    José de Nebra

    A great storm, my friend, raised in the jungle.
    Many storms are kicked up by mothers-in-law!
    Oh Brújula, Brújula, Brújula!
    Oh stupid, stupid, stupid!
    Oh Títiro, Títiro, Títiro!
    He’s my drone.
    And dancing this kind of fandango
    they do not give a monkey’s about all these noises.

    Adiós, prenda de mi amor
    Aria, from “Amor aumenta el valor”
    José de Nebra

    Goodbye, pledge of my love
    that you will manage to win,
    since you must possess my soul
    and it will give you courage.

    I hoped to be your husband,
    but the treacherous fate did not want it.
    Dying, passing away,
    I will satisfy its rigour



    ENGLISH